viernes, 10 de septiembre de 2010


Además de que me abrace 
le pedí que me quisiera...

Demostrarle de verdad que habia tanta pasión junta Dentro de mi corazón, ahi en su cama desparramada. En media hora de infierno toqué el cielo con las manos

Se notaba en el colchón más sudor que en cualquier otro. Y con caricias intentaba sanar su corazón roto. Porque hace falta mucho más que dinero o propina de segunda para tapar en el alma ese agujero, que de amargura se inund
a


Si no hay mal que por bien no venga,
¿Qué bien te trajo hasta mi?

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